Violeta, una madre de 35 años, volvió a casa con sus tres hijos tras permanecer internada por más de 90 días en el Hospital Goyeneche a raíz de una cardiopatía congénita: Ductus Arterioso Persistente.
Esta afección, que provoca la muerte por insuficiencia cardíaca y pulmonar, la mantuvo en estado crítico desde su ingreso el 10 de febrero. La arteria aorta de la mujer, se comunicaba con la arteria pulmonar, defecto que normalmente se cierra al mes de nacer, pero ella vivió con este mal por más de 30 años.
Durante dos meses, Violeta permaneció en UCI con ventilación mecánica y tratamiento intensivo, hasta ser estabilizada y sometida a una compleja cirugía torácica el pasado 13 de marzo a cargo del doctor Jhonny Castillo Moreano.
La intervención consistió en una toracotomía y cierre del defecto con la técnica del clipaje, usada comúnmente en aneurismas, ante la imposibilidad de trasladarla a otro centro especializado debido a su delicado estado de salud.
La paciente expresó su gratitud al trabajo conjunto de médicos, enfermeras, técnicos y personal del nosocomio que hicieron posible su recuperación. “Gracias. Ustedes me han salvado la vida”, expresó con emoción.