El techo del área de laboratorio del Centro de Salud Apurimac del distrito de Alto Selva Alegre, en Arequipa, colapsó nuevamente hace algunos días, generando gran preocupación entre el personal médico y la comunidad. Afortunadamente, no se reportaron personas heridas. Sin embargo, el hecho expone nuevamente las condiciones precarias en las que opera este establecimiento de salud.
Este es el segundo desplome registrado en menos de dos meses. El primero ocurrió el pasado 21 de febrero, lo que motivó compromisos de acción por parte del Gobierno Regional de Arequipa y la Municipalidad Distrital de Alto Selva Alegre. No obstante, según el presidente del Clas Microred Salud de Alto Selva Alegre, Jeison González, «hasta ahora no han hecho nada. En su momento solo vinieron a tomar fotos», denunció.
El ambiente afectado muestra fierros oxidados con ladrillos expuestos. Los equipos médicos que antes se desinfectaban en ese lugar ahora se lavan en los baños, ante la falta de una solución inmediata.
Además del laboratorio, otras áreas presentan daños severos, se pueden ver rajaduras que encienden las alarmas de más colapsos. En odontología, el techo está completamente deteriorado y aún hay equipos en riesgo. En obstetricia, el personal continúa atendiendo a mujeres embarazadas pese a que el techo también representa un peligro latente.
Entre los compromisos incumplidos están: el mantenimiento de la infraestructura en un plazo de tres meses por parte del Gobierno Regional, la habilitación de módulos de atención en el complejo Jáuregui, y un diagnóstico situacional prometido por la municipalidad distrital. Nada de eso se ha cumplido.
Mientras tanto, el centro sigue atendiendo pacientes en condiciones que comprometen la seguridad de los usuarios y del médico personal.