El comandante general de la Policía Nacional del Perú (PNP), Víctor Zanabria Angulo, fue acusado por seis suboficiales, bajo la figura de testigos protegidos, de ser obligados a realizar trabajos de construcción en horario laboral, cuando Zanabria era jefe de la Región Policial Arequipa en 2020.
Según el dominical Panorama, en aquel entonces el general solicitó voluntarios entre su personal para refaccionar una pequeña capilla y el casino dentro de la región policial, cuando se dispuso a seis suboficiales-en su mayoría recién egresados de la escuela de Policía- para trabajos de albañilería, gasfitería y electricidad, así lo confirmó la mayor Claudia Del Castillo.
“Le pregunté si lo va regularizar con un documento, me indicó que debo acatar las órdenes verbales y me preguntó “si tenía miedo”, y le indique “comprendido mi general”, relató Del Castillo.
Los suboficiales fueron registrados oficialmente como si estuvieran cumpliendo labores de patrullaje a pie a fin de recibir el rancho, cuando en realidad realizaban trabajos de construcción.
A la denuncia de los policías se suma el testimonio de Claver Colquehuanca, maestro de obra contratado para la refacción de una capilla dentro de la región policial.
Colquehuanca afirmó que recibió una transferencia de más de S/ 17 mil, pese a que su pago acordado era de S/ 4,700 y de esa suma le debían S/ 200. Según su relato, el propio Zanabria le indicó que cobrara el monto y devolviera la diferencia en efectivo.
“Me sorprendí por la cantidad que había (…) El general me dijo: ‘no te preocupes, cóbralo y el resto me lo das’”, declaró el maestro de obra.
Ante este hecho, el general minimizó las acusaciones, señalando que se trató de trabajos voluntarios en beneficio del personal policial y que no hubo abuso de autoridad. “No hay ningún abuso de autoridad al haber desarrollado una obra para el beneficio y bienestar del personal, con la participación del propio personal en forma voluntaria”, expresó Zanabria.