Este miércoles 18 de junio, profesionales del Trabajo Social se congregaron frente a la Gerencia Regional de Trabajo en Arequipa para protestar contra el Decreto Supremo N.° 005-2025-TR, publicado el pasado 14 de junio, el cual deroga la norma N.° 009-65 que obligaba a las empresas con más de 100 trabajadores a contratar a un profesional de esta especialidad.
A la movilización asistieron trabajadores sociales de hospitales como el Honorio Delgado y el Goyeneche, así como estudiantes de la Universidad Nacional de San Agustín (UNSA) y la Universidad Católica de Santa María, además de miembros del Colegio de Trabajadores Sociales del Perú.
Con pancartas y arengas como “¡Trabajo Social con lucha y dignidad!” y “¡Este decreto va a caer!”, los manifestantes expresaron su rechazo a la eliminación de lo que consideran un espacio profesional clave en la defensa del bienestar de los trabajadores dentro de las empresas.
“Nos están quitando un derecho ganado”
Lucila Velázquez Alvarado, trabajadora social con más de 40 años de experiencia y miembro del colegio profesional, manifestó que el actual Decreto representa una pérdida para el enfoque social dentro de las instituciones públicas y privadas.
“Nosotros ya no podremos trabajar con las familias, ni en el bienestar social, se anula también el trabajo de prevención de acoso y otros que afectan los derechos de los trabajadores a tener una vida digna”, declaró a Radio Yaraví.
Añadió que en Arequipa existen alrededor de 5 mil trabajadores sociales que laboran en distintos sectores como educación, salud, justicia, minería, entre otros.
“Nos están quitando ese derecho que teníamos de que en cada 100 trabajadores tenía que haber obligadamente una trabajadora social. Es un atentado no solo contra nosotros, sino contra todos los trabajadores del Perú”, expresó.
Velázquez también hizo un llamado a los trabajadores de distintos sectores a sumarse a la protesta, señalando que la eliminación del área de bienestar social dentro de las empresas afectaría la protección de los derechos laborales.
Finalmente, lamentó el impacto que esta medida podría tener en las nuevas generaciones.
“La carrera había logrado un auge grande en cuanto a mercado laboral en los últimos años, y ahora nos cortan las alas a nosotras y a las futuras profesionales”, concluyó.