Víctor Zanabria, quien fue suspendido por el Poder Judicial del cargo de comandante general de la Policía Nacional del Perú (PNP), afirmó que su defensa apelará la resolución y sostuvo que se retira “orgulloso” de su puesto.
El alto mando calificó de “excesiva” la medida dictada en su contra en el marco del caso Policías albañiles, donde se le investiga por presuntos delitos de peculado, colusión agravada y abuso de autoridad.
En una conferencia de prensa, Zanabria aseguró que siempre buscó el bienestar de su personal y defendió la participación de efectivos en trabajos de construcción de diversos espacios.
«Se ha construido una iglesia al servicio de la comunidad por 8 efectivos policiales. Y estamos frente a este edificio, que aquí están los que, con sus propias manos, lo han construido, como siempre se ha hecho en la Policía, romper la brecha con el esfuerzo de cada policía. Sí por eso me van a sancionar, orgulloso me voy», indicó.
El oficial señaló que cumplirá la decisión judicial, aunque insistió en que su abogado ya presentó la apelación. Añadió que le restaban 18 días de servicio en la PNP y que la presidenta Dina Boluarte designará a su reemplazo en ese plazo.
¿POR QUÉ SE LE ACUSA?
Los hechos datan del 2020, cuando Zanabria era jefe de la IX Macro Región Policial. Suboficiales afectados y testigos protegidos señalaron que fueron obligados a labores de albañilería, mientras se reportaba oficialmente que realizaban patrullaje en las calles.
El abogado de los policías agraviados, José Antonio Palacios, advirtió que las acusaciones podrían derivar en una condena no menor de 10 años y resaltó que tiene otros procesos abiertos.