Un ejemplo a seguir. Ricardo Gonzáles Durán, es un cirujano con 25 años de experiencia quien ha operado a más de 100 pacientes de escasos recursos en la ciudad de Puno, sin pedirles un sol a cambio. El viene realizando esta noble labor apoyando a los que más necesitan desde 1994.
“Muchas veces los pobladores en modo de agradecimiento me pagaban con corderos, quesos, hasta el punto de que mi refrigerador estuviese repleto de estos productos”, agregó el doctor con una sonrisa en el rostro.
El cirujano de 58 años estuvo de visita en Arequipa para ser condecorado por su alma máter, la Universidad Nacional de San Agustín. Hizo un llamado a los nuevos médicos en que no piensen en solo trabajar en grandes hospitales, sino que piensen en que su Perú los necesita, porque aún en las zonas más alejadas hay pacientes que requieren que un médico les dé calidez y calor humano.
"Sigan la carrera si tienen vocación, no lo hagan porque vieron a un médico plástico con su Audi, un carro último modelo. Que lo hagan con el deseo de servir y mejorar la salud de nuestro país", dijo.
Ante la falta de médicos que no quieren trabajar en Puno, Gonzáles, indicó que ellos mismos están formando a sus propios cirujanos entre ginecólogos, pediatras, anestesiólogos los cuales son de alta calidad y muy competitivos.