La ordenación se realizó este miércoles 15 de agosto, en la Basílica Catedral, a las 6 p.m. en compañía de sus rectores, formadores, familiares, amigos, hermanos de comunidad, seminaristas, religiosas y miembros del Clero.

Los nuevos diáconos son: Richard Bolaños Dongo, Jaime Alessander Chacón Talavera, Fernando Raúl Quicaño Miranda, David Vidal Quispe Huanqui y Koan Li Vásquez Rosales (Cerro de Pasco) del Seminario Arquidiocesano «San Jerónimo» y Fernando Alves de Souza (Brasil), Stefano Giordano (Italia) y Víctor Nicolás Ruiz Ruiz del Seminario Arquidiocesano Misionero «Redemptoris Mater».

“Ser diácono significa estar en conformidad total con el Señor Jesús, el mismo, quien se entregó por nosotros hasta dar la vida. Precisamente a eso están llamados en adelante mediante su servicio a la Iglesia, por la gracia que se les concede en el orden diaconal”, recordó el Prelado.

Durante la ceremonia los seminaristas pronunciaron las promesas diaconales. Tras el himno del “Veni Creatore” al Espíritu Santo, se procedió a la proclamación de las Letanías durante las cuales los ordenados se postraron en tierra, este es el momento en el que se solicita la intercesión de los Santos para que cada uno de los jóvenes pueda cumplir con sus nuevas obligaciones dando un verdadero testimonio de vida.

Finalmente se realizó el revestimiento con la indumentaria propia del orden diaconal. La estola  cruzada en el cuerpo desde el hombro izquierdo y unida hacia el extremo derecho, sobre el alba, que será el distintivo de los nuevos diáconos.  Sobre esta va la dalmática, vestidura utilizada sobre todo en las grandes celebraciones y solemnidades.

Un Diácono como Ministro Ordinario puede ejercer el ministerio de la Liturgia de la Palabra con la predicación, puede celebrar los Sacramentos del Bautismo y Matrimonio, bendecir y servir en la Mesa Eucarística. Los ahora ordenados cumplirán sus labores en las diferentes parroquias de la Arquidiócesis en espera de ser ordenados sacerdotes.

NDP 

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